Los recuerdos atormentaban a Edward, Rosalie, Bella y Emmett.

El ambiente en las dos mansiones era tenso, hasta los hijos de ambas parejas habían notado el distanciamiento entre sus padres.

Las semanas fueron pasando y la situación se tornaba más problemática, las discusiones entre Rosalie y Edward subían de nivel, Edward solía tomar casi todos los días y Rosalie trataba de estar el menor tiempo posible en casa.

Emmett se había marchado a los Ángeles intentando tener claridad en sus pensamientos.

Bella había optado por dedicarse a sus hijos y a su  trabajo.

Días después, un cliente muy importante cito a Emmett en Forks, por consiguiente aunque juro no llamar a Rosalie, tuvo que hacerlo, logrando una cita con ella.

En ella hablaron de muchas cosas del pasado, sentían que aun no habían cambiado, que seguían siendo los mismos estudiantes, que los años no habían pasado y su amor aun se encontraba vivo.

Emmett decidido volvió a Seattle para hablar con Bella.

Edward aprovecho su paso por Seatlle para buscar a Bella, la convenció de hablar una ultima vez, ella a regañadientes acepto.

La conversación no tuvo un avance significativo, la culpabilidad de los dos reaparecía ante cada argumento, lo único que Edward pensaba era, en como hubiese sido su vida con Bella, mientras Bella se juzgaba por estar allí con Edward.

Tras varias discusiones Bella decidió irse, ella sabía que lo amaba aun, que lo que sentía por Emmett era un espcial cariño, pero que su corazón latia fuertemente por Edward, lo supo desde el primer momento en que lo vio nuevamente.

Furiosa consigo misma Bella regreso a su casa, dejandole a Edward claras sus intenciones de olvidar aquel pasado.

Edward resignado regreso a su hogar, estuvo hablando con Rosalie de lo ocurrido y los dos acordaron esperar la decisión de Emmett y Bella.

Edward y Rosalie, eran ante todo amigos y no querían hacerse daño con una relación que nos les permitiera ser felices, si bien habían pasado 25 años juntos, ninguno le podía negar al otro el profundo amor hacía Bella y Emmett.

Tres semanas pasaron en donde Emmett y Bella decidieron permanecer juntos por sus hijos, Edward y Rosalie esperaban la decisión, pero comenzaban a desesperarse por la incertidumbre.

Bella había estado hablando con sus hijos, pero ellos no habían apoyado a sus padres, ellos no habían revelado el motivo real pero no querían hacer algo que afectará a sus hijos de por vida, su felicidad estaba por debajo de la de sus hijos.

Sin palabras, con mucho dolor, sin explicaciones y con agonía Edward y Rosalie asumieron la decisión de sus seres amados.

Juntos prometieron darse una oportunidad, cada pareja realizaría un viaje, tratarían de recuperar su matrimonio, lo harían por sus hijos, por que ellos se merecían aun tener un hogar como el que tenían.

Tres días después el acuerdo estaba hecho, cada quien iría a su destino, revivirían los 25 años pasados y si no era posible, volverían, enfrentarían las consecuencias y simplemente serían felices, pero antes debían intentarlo por sus hijos.