Capítulo II

                                      Edward POV.                     

- No, Rose, aun no ha llegado- respondí por tercera vez cuando nos encontramos en el pasillo, sonreí- aun debe de estar buscando los mandos

-No ha tenido gracia- gruño

-Vamos, Rose tu también estabas molesta por la atención que le prestaba – sonrió malignamente mientras recogíamos nuestros "almuerzos”

-Posiblemente se ha quedado jugando- murmuro con voz molesta

-Lo dudo con Esme en casa – me senté frente a Jasper al llegar a la mesa

-¿Y Alice? – pregunto rose cuando se sentó

-Ha ido a la dirección – respondió Jasper sacudiendo la cabeza – a preguntar por…

-Isabella Swan – terminamos Rose y yo con fastidio, entendía un poco su preocupación por la muchacha, era la primera vez que un acontecimiento eludía sus visiones y la chica había sido la primera, y aun peor cuando tuvo que enterarse al escuchar a escondidas las conversaciones de los alumnos.

La nueva novedad de Forks, la hija pródiga del jefe Swan, que ahora brillaba por su ausencia, fue un poco cómico ver las caras de decepción de los chicos que la esperaban en la puerta, por lo que oí, a muchos castigaron por llegar tarde pero la chica Swan no había hecho acto de presencia en toda la mañana.

Había tantas historias sobre ella, lo único que sabía, que era mínimamente cierto era que después de la muerte de su madre se embarco hacia el antiguo continente, sin dar explicaciones, y con tan solo 12 años, al parecer fue a vivir con una tía y desde su viaje no había vuelto a aparecer… hasta ahora. El jefe Swan no cabía en sí de gozo, desde su llegada hace unos días … mis pensamientos se vieron interrumpidos cuando una Alice con el ceño fruncido se sentaba en su silla, por lo que vi en su mente no había encontrado nada, escondí una sonrisa

-Es una idiotez – gruño y todos la miramos sorprendidos, muy pocas veces se la veía enojada, Jasper rápidamente se le acerco y acaricio su brazo- no querían decirme porque aun no llegaba – me miro – podrías haber venido conmigo – me encogí de hombros, ganándome un gruñido, no quería saber sobre la chica nueva, ya tenía bastante con que el 90% de los tíos la tengan en sus pensamientos y no todas tenían la mente limpia. Deberías preocuparte un poco más por mí, Edward Cullen, ella será importante para mí me acuso mi pequeña hermana con su mente

-No lo sabes Alice –

- sí, si lo se

-No

- Si, y ella es… pero sus pensamientos se volvieron confusos cuando tuvo una visión

- ¿que fue eso, Alice?- pregunte mientras nos levantamos al mismo tiempo, recibiendo miradas curiosas

Rose y Jasper no quedaron mirando esperando una explicación ¿y ahora que pasa, otra vez esa Swan? pensó Rosalíe mientras miraba por la ventana, yo negué con la cabeza y mire a Alice afuera pensó esta y junto con su bandeja se encamino hacia el estacionamiento, todos la seguimos.

Cuando llegamos Alice miro a Rose con cara de arrepentimiento

- Rose, yo… comenzó Alice- Emmet…

- ¿Qué le paso?- grito Rose y a velocidad vampírica se coloco a unos centímetros de Alice, Jasper se alarmo pero yo negué con la cabeza y le puse un brazo en el hombro, Rosalíe pensaba muchas cosas a la vez pero atacar a Alice no estaba entre ellos

- ¿Alice? – pregunte también nervioso ¿le había pasado algo a Emmet?

- Despareció, no lo puedo ver – explico Alice- no sé qué…

Pero Rosalíe ya había salido corriendo hacia el bosque

- Jazz – susurro mirando a su pareja, tuvieron una de esas conversaciones privadas con solo mirarse y Jasper con un beso salió corriendo tras Rose.

- Vamos – dije leyendo sus pensamientos llenos de preocupación, nos subimos al coche

- ¿no sabes lo que pasa?- le pregunte pisando el acelerador, ella negó con la cabeza

Lo vi buscando los mandos por toda la casa, luego a Esme diciéndole donde estaban, después deje de vigilarlo pensando que vendría al instituto rápidamente, pero cuando no lo vi en el almuerzo, lo busque, pero no estaba por ningún lado- su vos tembló – simplemente desapareció, no le puede haber pasado nada verdad?

- No, Alice, tranquila – le sonreí ocultando mi preocupación- ¿no lo escuchamos siempre? Nadie puede con Él- pero Alice no me escucho tenía otra visión

- ¡Esme ha desaparecido!- dijo en un pequeño grito – ¿Qué está pasando?

- ¡qué demonios!- frene en seco cuando estuve en la entrada de la casa y corrí hacia la entrada, pero me pare en seco, escuche las voces de Rosalíe y Emmet y si, también la de Esme, suspire aliviado, pero fruncí el ceño al no escuchar sus pensamientos. Me acerque al umbral aun preguntándome porque no podía leerles la mente, pero fui empujado por una Alice que atravesó la habitación hacia los brazos ya extendidos de Jasper. La entrada de Alice había hecho parar todas las conversaciones, mi madre, Emmet y rose estaban rodeando a alguien que estaba en el sillón, y lo miraban con el ceño fruncido y caras de preocupación pero eso no me importo cuando di dos pasos hacia el interior, el aroma, proveniente de ese cuerpo se filtro en mis fosas nasales, dulce…demasiado y con un golpe demoledor a mis sentidos todo mi raciocinio escapo, y fue remplazada con una sola idea, sangre… su sangre y salte…