EDWARD POV

Todo el camino fue en silencio, yo no podía evitar quitarle la vista a Bella y a cada rato la miraba. Ella era tan hermosa la sola mención de su nombre hacía que mi piel se erizara. Llegamos a casa y nada había cambiado, todo continuaba igual con los mismos colores. Nuestros padres se encontraban en la entrada y nos recibieron con un enorme abrazo.

-Mamá, papá, esta es Rosalie mi novia y su hermano Jasper.- dijo Emmett.

-Encantada.- dijo mi madre.

-Ya era hora de que asentaras cabeza.- le dijo mi padre. -No nos esperen, iremos al hospital hay una emergencia y nos necesitan.- dijo mi padre.

Todos los despedimos y ellos se marcharon, genial ahora nos quedábamos solos los seis.

-Muy bien parece que nos quedamos solos.- dijo Emmett sonriendo.

-Quien quiere pizza.-dijo mi hermana.

Todos asintieron, aunque en estos momentos yo no podía pensar en comida, el viaje desde Londres había sido muy largo, necesitaba una buena ducha y después pensaría en comida. Todos entramos a la casa, mi hermana se dirigió hacia el teléfono para ordenar las pizzas, todos se acomodaron en el sofá de la sala y pusieron una película mientras esperaban las pizzas.

-Alice voy a darme una ducha en lo que llegan las pizzas, el viaje ha sido muy largo.- le dije a mi hermana y me dirigí a mi habitación.

- Muy bien Edward, pero no te demores, las pizzas no tardan en llegar.- me dijo mi hermana pero yo ya iba camino a las escaleras.

Todo en la casa seguía igual, las paredes mantenían los mismos colores que la última vez que las vi, no parecía que hubieran pasado tres años, todo se mantenía igual. Me dirigía hacia el tercer piso a la derecha donde se encontraba mi habitación. Por suerte a Alice no le dio por comprar mas nada, entre los libros y la música tenía la habitación llena.

Me quité la ropa y me metí a la ducha, esto era lo que necesitaba para relajarme, el sentir el agua fría cayendo sobre mí, ayudaba a liberar el cansancio del viaje, de pronto vino a mi mente la imagen de Bella, quería conocer más de ella, lo que le gustaba lo que no, al parecer ella y mi hermana se llevaban muy bien. Me pregunto desde cuando se conocían. Estaba tan metido en mis pensamientos, cuando de pronto sentí que alguien entro a mi habitación. ¿Quién sería? Tome una toalla y la coloqué alrededor de mi cintura, abrí la puerta para ver quién era y lo que vi me dejó  helado.

BELLA POV

El camino a la casa fue en silencio, lo único extraño era que a cada rato sentía como si alguien me estuviera mirando, tenía el presentimiento de que era Edward, pero como siempre sucede conmigo, tenía miedo, miedo de encontrarme con su mirada y perderme en esos ojos verdes. Como me gustaría conocerlo mejor, pero sabía que para eso habría tiempo, aunque Alice me podía ayudar, después de todo era su hermano.

Llegamos a la casa y Esme y Carlisle se encontraban en la entrada. Todos los saludamos y Emmett les presentó a Rosalie y a Jasper.

-Ya era hora de que asentaras cabeza hijo.-le dijo Carlisle.- No nos esperen, iremos al hospital hay una emergencia y nos necesitan.

Todos nos despedimos y ellos se marcharon, genial ahora nos quedábamos solos los seis.

-Muy bien parece que nos quedamos solos.- dijo Emmett sonriendo.

-Quien quiere pizza.-dijo Alice. Todos asentimos y nos encaminamos hacia adentro de la casa.

Todos nos sentamos en el sofá mientras que Alice iba por el teléfono para ordenar las pizzas. Cuando regresó Alice pusimos una película, pero faltaba alguien, faltaba Edward.

-Alice voy a darme una ducha en lo que llegan las pizzas, el viaje ha sido muy largo.- le dijo Edward a Alice mientras se dirigía hacia su habitación.

-Muy bien Edward, pero no te demores, las pizzas no tardan en llegar.- le contestó Alice cuando el iba camino a las escaleras.

Comenzamos a ver la película en silencio, a Emmett se le ocurrió poner una comedia romántica, claro el tenía a Rosalie a su lado y se encontraban muy abrazados. Alice por su parte estaba conversando muy animadamente con Jasper.

-Alice, yo también necesito un baño, regreso antes que lleguen las pizzas.

-Muy bien Bella, tomate el tiempo que quieras.

Me levanté y comencé a dirigirme hacia mi habitación, estaba cansada, hoy había sido un día muy atareado. Entre a mi habitación y comencé a quitarme la ropa, quedando solo en ropa interior. Un buen baño era lo que necesitaba para quitarme el cansancio. La imagen de Edward sonriendo venía a mi mente una y otra ves, no podía evitar pensar en el, en como se vería debajo de toda esa ropa…-Bella  deja de pensar idioteces y concéntrate en lo que importa ahora, un buen baño,- me decía a mi misma.

Me estaba terminando de preparar, cuando siento la puerta del baño abrirse, me giré hacía allí y por ella apareció…¡Edward! Mis ojos no creían lo que veían. Edward estaba parado en la puerta del baño, con solamente una toalla por la cintura, estaba todo mojado y el agua caía por su perfectos y bien formados músculos del pecho hasta perderse en la toalla. Yo estaba en shock, no podía moverme, había intentado imaginármelo así pero…de ahí a tenerlo ahora mismo frente a mi, mirándome de una forma…diablos.

Me giré corriendo y tomé una sábana para cubrirme, se me había olvidado que estaba en ropa interior. No pude evitar ruborizarme, después de todo era el primer chico que me veía así. No podía creerlo el primer día que lo conozco y ya me había visto en ropa interior.

-¿Qué haces en mi habitación?- le dije intentando no sonar nerviosa, cosa que fue imposible.

-Eso mismo iba a preguntar yo.-me dijo el, eso me confundió un poco.

-Disculpa, no te entiendo.

-Esta es mi habitación, aunque parece que a Alice se le olvidan ciertas cosas.-me dijo y comenzó a acercarse a mi.

Yo no lo podía creer, que me estaba sucediendo, mi corazón comenzó a latir a mil por segundo a medida que el se acercaba a mi. Pero que me pasaba, si solo es el hermano de mi mejor amiga, al cual acababa de conocer.

-En ese caso, iré  a ver a Alice para que me diga donde dormiré hoy.- le dije y comencé a coger la ropa para vestirme.

Pero como siempre me pasa, que cuando me apuro sucede algo malo, me enredé con la sabana con la que me estaba cubriendo…ya me veía en el suelo, pero no sé de que forma fui a parar a los brazos de Edward. Esto era lo que me faltaba, estar así tan cerca de el, y ambos casi desnudos, ya sentía el calor acumulándose en mis mejillas.

-Te encuentras bien.- me dijo Edward.

-Si.- le dije intentando no sonar nerviosa.

Pero lo que sucedió a continuación fue mucho peor. No se en que momento se me ocurrió intentar levantarme, pero eso solo hizo que nuestros rostros quedaran muy pegados. Ya podía sentir su respiración sobre mi, su nariz rozando mi mejilla…estaba a punto de sentir sus labios sobre los míos…

-Bella no vayas a tu habitación es la de…

Pero Alice ya había entrado en la habitación y se había quedado con la boca abierta cuando nos vio a mi y a Edward casi desnudos y a punto de besarnos. Nos giramos hacia Alice, la cual no reaccionaba.

-Alice no es lo que tu piensas.- le dije soltándome de Edward.

-Y que es lo que yo pienso.- me dijo ella.

-Bueno que yo y Edward…- no pude terminar, me daba tanta vergüenza.

-Alice, porque no me dijiste que Bella dormía en mi habitación.- le dijo Edward.

-Es que no tuve tiempo, tu subiste a bañarte y cuando Bella dijo que se bañaría también…solo después me di cuenta de que…fue un mal entendido, lo siento.- le dijo  Alice, parecía apenada.

-No te preocupes Alice, solo fue un mal entendido…pero donde dormiré yo entonces.- le dije.

-En la habitación de al lado, recoge tus cosas y sígueme.- me dijo y salió por la puerta.

Comencé a recoger mis cosas para cambiarme de habitación, Edward me miraba de una forma extraña, y yo no me atrevía a mirarlo, tenía miedo de volverlo a mirar y terminar lo que Alice interrumpió.

-Lo siento mucho Edward, por todo esto, te prometo que no volverá a suceder.-le dije tan rápido como pude.

-No tienes porque disculparte, todo fue culpa de Alice.- me dijo acercándose nuevamente a mi.

-Tienes razón, ya la haré pagar por eso.- le dije y comencé a caminar para mi nueva habitación. De pronto el me agarró por el brazo y me susurró al oído.

-Espero que esto no se quede así.- y me soltó.

Salí de la habitación como pude, ni siquiera me atrevía a mirar atrás. Llegué donde Alice en la habitación de al lado y ella me miró con cara de sospecha.

-¿Sucedió algo Bella?- me dijo Alice, haciéndose la inocente, si ella supiera que no había sucedido nada por su interrupción.

-Nada Alice.- le dije como pude, no la podía mirara a la cara, no después de lo que casi interrumpió.

-Esta será tu habitación a partir de ahora, espero que no hayan más confusiones.- y diciendo esto salió de la habitación.

EDWARD POV

Yo no podía creer lo que veía, ella se encontraba ahí de pie frente a mi, mis ojos la recorrieron completa, ella estaba en mi cuarto y…en ropa interior…diablos pero que rayos hacía ella aquí…y así. Debería  decir que no se veía nada mal, tenía un cuerpo muy hermoso, ella se encontraba ahí parada frente a mi como en estado de shock, mirándome de arriba abajo…rayos Edward solo tienes una toalla puesta, como no te va a mirar, y estas mojado.

De pronto se giró rápidamente, al parecer se había dado cuenta que ella estaba en ropa interior y fue directo a coger una sábana para cubrirse.

-¿Qué haces en mi habitación?- me dijo, sonaba un poco nerviosa, y no es para menos.

-Eso mismo iba a preguntar yo.-le contesté.

-Disculpa, no te entiendo.

-Esta es mi habitación, aunque parece que a Alice se le olvidan ciertas cosas.-le dije y comencé a acercarme a ella.

Estaba loco al hacer esto pero había algo que me impulsaba a acercarme a ella, a besarla, a tenerla entre mis brazos. Si estaba loco pero loco por ella, como era posible que me hiciera sentir así cuando hace apenas unas horas que la conozco.

-En ese caso, iré  a ver a Alice para que me diga donde dormiré hoy.- me dijo y comenzó a recoger la ropa para vestirse.

Pero lo que pasó a continuación no me lo esperaba, era como si todo estuviera a mi favor. Bella se enredó con la sábana que se estaba cubriendo  e iba directo al suelo, pero yo fui mas rápido y la agarre entre mis brazos antes de que se golpeara. La tenía tan cerca que podía sentir como latía su corazón acelerado.

-Te encuentras bien.- le dije.

-Si.- me dijo un poco nerviosa.

Ella torpemente intento levantarse pero eso solo hizo que nuestros rostros quedaran más pegados. Podía sentir su respiración sobre mi, podía ver sus labios que me invitaban a besarlos…estaba a punto de hacerlo cuando…

-Bella no vayas a tu habitación es la de…

Pero Alice ya había entrado en la habitación y se había quedado con la boca abierta cuando nos vio a mi y a Bella casi desnudos y a punto de besarnos. Nos giramos hacia Alice, la cual no reaccionaba.

-Alice no es lo que tu piensas.- le dijo Bella a mi hermana que no reaccionaba, estaba en shock.

-Y que es lo que yo pienso. –le dijo ella.

-Bueno que yo y Edward…- no pudo terminar, parecía avergonzada.

-Alice, porque no me dijiste que Bella dormía en mi habitación.- le dije a mi hermana.

-Es que no tuve tiempo, tu subiste a bañarte y cuando Bella dijo que se bañaría también…solo después me di cuenta de que…fue un mal entendido, lo siento.- me dijo Alice, parecía apenada.

-No te preocupes Alice, solo fue un mal entendido…pero donde dormiré yo entonces.- le preguntó Bella.

-En la habitación de al lado, recoge tus cosas y sígueme.- le dijo y salió por la puerta.

Ella comenzó a recoger sus cosas para cambiarse de habitación, no podía evitar mirarla, se veía hermosa. Si Alice no nos hubiera interrumpido quien sabe lo que hubiera sucedido. Estaba metido en mis pensamientos cuando ella habló.

-Lo siento mucho Edward, por todo esto, te prometo que no volverá a suceder.-me dijo rápidamente, ella se arrepentía de esto.

-No tienes porque disculparte, todo fue culpa de Alice.- le dije acercándome nuevamente a ella.

-Tienes razón, ya la haré pagar por eso.- me dijo y comenzó a caminar hacia su nueva habitación.

Tenía que hacer algo decirle algo, esto no se podía quedar así, ella quería besarme y yo me moría por hacerlo. La agarre por el brazo y le susurré al oído.

-Espero que esto no se quede así.- la solté y ella salió de la habitación.

Me metí a la ducha, necesitaba otra  después de lo que había pasado no era para menos. Bella tan cerca de mi…prácticamente desnuda, y casi a punto de besarnos…que si no hubiera sido por Alice. Decidí que también tenía que vengarme de ella, si  ella no hubiese interrumpido quien sabe lo que hubiera pasado.

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