La Vida es Corta (+18)

Autor: AliiCullen
Género: Romance
Fecha Creación: 17/05/2010
Fecha Actualización: 29/05/2010
Finalizado: NO
Votos: 5
Comentarios: 4
Visitas: 5525
Capítulos: 3

Edward ya no cree en el amor piensa que no sirve de nada entregar el corazón por que al fin de cuentas siempre te lastiman .El a sufrido y no quiero volver a sufrir , aparte de que se ha vuelto alguien engreído que solo sale con las chavas para usarlas ¿ Habra alguien que lo valla sentar cabeza?¿El pobre volver a entregar el corazón sin ser lastimado? .

 

 

Bella una chica que ha vuelto a el pueblo donde había vivido de niña , donde es ahí su pesadilla personal Froks , pero al llegar ahí se encuentra con gente que jamás pensó conocer . Alice se convierte en su mejor amiga , pero ella tiene un hermano Edward al cual Bella detesta es un engreído que que piensa que puede tener a cualquier chava en la palma de su mano .¿Bella se enamorara de Edward.? ¿Podra Bella saber por que Edward es asi con las Chicas? ¿Podra Bella hacer que Edward confie en ella ¿

 

 

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Capítulo 1: De regreso a la pesadilla personal.

Me daba mucha pena abandonar a mi madre, pero con Phil estaría más que mejor, yo últimamente tan solo era un estorbo, y no quería ser eso.

-Te quiero mucho, hija no hace falta que hagas esto por mi –me dijo abrazándome fuertemente mama.

-Por ti lo haría todo y mas, mama –le dije yo apartándola de mí.

Nos dedicamos una mirada de despedida y le di un beso en la mejilla a Phil. Después de eso cogí mi avión hacia Forks, mi peor pesadilla.

Era un pueblecillo de 3.120 habitantes donde el sol yacía casi siempre encapotado. El pueblo donde más llovía de todos los Estados Unidos. El verde lucía casi siempre y le daba un toque oscuro al pueblo. Vivir allí, para las personas torpes, como yo, era la peor prueba.

El vuelo paso rápido, quizá porque me dormí a mitad del trayecto. Charlie me estaba esperando en el aeropuerto de Port Ángeles.

-¡Bella! –exclamó nada más bajar del avión-. Cuanto has cambiado.

-Hola Ch… papa –debía llamarle así, por no herir sus sentimientos.

-Trae que te ayudare con todo esto –dijo cogiendo mis maletas.

Durante el trayecto me conto lo que había pasado en estos años y me hablo de los chicos de la reserva Quileute, que habían sido sus grandes amigos, y también me hablo de Mark, su ayudante de la comisaria. Mi padre era el jefe de policía de Forks.

Todo estaba como recordaba, la casa y mi habitación, que lo único que había sido substituido fueron una cuna por una cama y un escritorio.

La noche, la pase en vela, no podía dormir con el molesto ruido de la lluvia al golpear la casa, resultaba molesto, debía dormir, mañana sería mi primer día en la escuela de Forks y estábamos a medianos de semestre ¡Genial! Murmuré en plan sarcástico.

Ese día decidí ponerme ropa sencilla, unos jeans y un jersey de cuello alto de color azul, me puse mis botas impermeables y baje a toda carrerilla por las escaleras. Charlie me esperaba en la cocina.

-He pensado que no te haría mucha gracia que te llevara todos los días a clase con el coche de patrulla –me dijo bebiendo su taza de café.

-¡Qué bien papa, eres un adivino! –le dijo sarcásticamente.

-Te he hecho un regalo –dijo señalando un coche rojo que había aparcado en la acera de nuestra casa.

-¡Qué me dices! Te quiero mucho papa –dije abrazando a mi padre.

-Yo también –me dijo, a él no le gustaba hablar de sentimientos.

Me fui directa al instituto, había vehículos tan antiguos como el mío, no desentonaba, excepto un Volvo plateado. Camine bajo la lluvia hasta llegar a un pequeño despacho donde me entregaron el horario de clase.

Se veían muchas miradas curiosas, seguro que en un pueblecillo como ese, el rumor de que la hija del jefe Swan volvía a Forks era todo un chismorreo desde hace semanas. Yo solo camine mirando el suelo del instituto.

Camine hasta llegar a clase de Español, allí conocí a una chica llamada Jessica, me pregunto que si quería almorzar con ella y sus amigas, yo acepte.

El almuerzo paso rápido Jessica y otra amiga suya, Angela, tan tímida como yo, me hicieron un montón de preguntas sobre mi vida. Yo las respondí sin ningún problema.

Llegó la hora de Biología, saliendo de la cafetería me saludo un chico alto y rubio.

-Hola, yo soy Mike Newton –dijo alzando la mano-. Tú debes de ser Isabella.

-Bella –le corregí yo estrechándole la mano.

-Encantado, Bella. ¿Tienes Biología ahora? –me pregunto.

-Sí, ahora voy para la clase –le dije yo mirando mi horario.

-Yo también te acompaño –me siguió guiándome hacía el aula.
Hablaba demasiado, se nota que tenía intereses. No sé que veía la gente para mi, era torpe, tímida y no me iba mucho la marcha. Nunca había sido adolescente, como decía mi madre.

Cuando entramos en la aula el Mike me presento al profesor.

-Isabella Swan –dijo dándome una sonrisa.

-Bella –le corregí, como no sé cuantas veces que lo había hecho hoy.

-Bueno, supongo que te tendrás que sentar en ese sitio de ahí –dijo señalando un pupitre donde estaba sentado un chico.

Alzó la vista y se me quedo mirando. Tenía el pelo cobrizo y unos ojos verdes. Era muy guapo, parecía un modelo.

Fui a sentarme a su lado, pero me tropecé antes de llegar. Me cayeron todos los libros por el suelo. Enseguida unas manos cogieron todos los libros.

-Toma –murmuró el chico y me dejo los libros sobre la mano, la tenía muy cálida en comparación con el frío que hacía-. Yo soy Edward Cullen. Tú debes de ser Bella.

-Si –le conteste sentándome en mi sitio.

Me senté en mi lugar, el profesor nos mando hacer una tarea muy fácil y enseguida la acabé, ya la había hecho en mi otro instituto.

-¿Sabes cual es esta respuesta? –murmuro el chico señalando el libro.

-Sí. Es muy sencilla –le dije señalando en lugar del libro donde lo ponía.

-Ah, sí. Gracias, Bella –dijo sonriéndome.

Enseguida el también acabo sus deberes y se puso a garbatear en su cuaderno unos dibujos sin sentido.

-¿Cómo es que viniste a vivir a Forks? –me dijo de repente.

-Mi madre se ha vuelto a casar y mi padrastro viaja mucho –le dije yo.

-¿Tu madre te dijo que vinieras aquí a vivir? –dijo el frunciendo el ceño.

-No, se que ella era desdichada cuando se separaba de Phil. Así que decidí venir a vivir aquí, con mi padre –le explique.

-No parece muy justo. Ahora eres tu desdichada –dijo el. Saco la conclusión desdichada.

-No tanto como crees. No es tan malo vivir en Forks -hice una mueca al decir eso, era mentira, Forks era mi infierno personal.

Entonces sonó el timbre. Recogí las cosas y salí de la clase. Edward me alcanzo y camino a mi lado.

-¿Te gusta el frío? –dijo intentando entablar conversación.

-No, tampoco la humedad –le dije yo. Entonces ya estábamos llegando al aparcamiento.

-¡Edward! –grito una chica detrás nuestro. Era bajita, con ojos de color chocolate y con una sonrisa de duendecillo, cada punta de su pelo se dirigía hacía una punta.

-Hola Alice –dijo cuando nos alcanzó-. Bella esta es Alice, mi hermana. Alice, Bella –nos presento.

-Encantada –dijo ella dándome un beso en la mejilla.

-Igualmente –le dije bajando la mirada al suelo.

-Vamos, Edward. Rose, Emmet y Jasper nos esperan –dijo arrastrándole hacía su coche.

Pararon en el lujoso Volvo ¿Era suyo? ¿Por qué no me extrañaba? Subieron al coche y salieron del aparcamiento.

Capítulo 2: Viejos amigos

 


 


 
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