-Suéltame Jacob, me haces daño-roge tratando de que aflojara un poco su agarre de mi muñeca- por favor-dije sin poder evitar que unas cuantas lagrimas se escaparan de mis ojos.

Hoy como tantas veces se encontraba borracho, aún más que de costumbre, pero eso no le impedía golpearme. En la vida uno comete varios errores, pero yo, yo cometí el peor de todos, y no solo uno sino varios, uno tras otro, tras otro me llevaron hasta donde estoy hoy, comenzando por aquel que marco mi condena definitiva.

Flash back

Era viernes y con mi novio nos dirigíamos a un bar a las afueras de la ciudad, allí nos reuniríamos con varios amigos para pasar un buen rato ya que al tener tanto estrés con el estudio, al estar a tan solo 2 meses de acabar el instituto, necesitaba despejarme y disfrutar un poco, Jacob me llevaba 4 años y ya había pasado por el instituto, así que cada vez que tenia oportunidad me invitaba a salir. Cuando  llegamos ya todos estaban allí, bailamos y disfrutamos hasta alrededor de las 3 de la mañana, cuando estábamos a tan solo dos calles de la casa, vi varias patrullas de policía y una ambulancia, al acercarnos un poco más pude observar que sacaban dos camillas de mi casa. Llegue junto a los paramédicos, y lo que vi me devasto, el cuerpo de mis padres inertes y si vida eran los ocupantes de las camillas. No me moví, no reaccione, simplemente observe a mis padres allí negándolo todo, apenas fui consiente cuando Jacob me llevó dentro de la casa, mil veces lo negué todo, no lo quería creer, pero el día del entierro todo se me vino encima, no pude negarlo más, era real mis padres habían muerto, grite y llore todo lo que no había hecho antes. Los siguientes días furos similares, paso una semana en la cual no salía para nada, me la pasaba encerrada en el cuarto y solo comía porque mis amigos y Jacob me obligaban, al cabo de dos semanas más y con la ayuda de todos trate de seguir con mi vida Jacob me ayudo con el último pago del instituto y pase este sin problemas, pero al revisar las cuentas bancarias de mis padres me di cuenta de que tenían varias deudas, y no había forma de saldarlas ya que ni con el seguro de vida de mis padres alcanzaba, llame a Jacob para que me aconsejara que hacer, le conté solo lo de las deudas, mas no le comente sobre el valor del seguro de vida y al cabo de unos minutos pareció hallar la solución.

-Vende la casa…

-Jacob no…

-Déjame terminar-hizo una pausa para asegurarse de que no lo iba a interrumpir-vende la casa, con la plata que te den paga las deudas que dejaron tus padres y con el resto podemos comprar juntos una nueva casa lejos de aquí lejos de los recuerdos…… cásate con migo Bella, junto a mí no te faltaría nada, te pagaría la universidad, pero con la única condición de que aceptes ser mi esposa... solo piénsalo.

Y con esas últimas palabras se fue, lo pensé varios días, tenía miedo, pero era mi única opción, así que al final… acepte; después de la boda, nos mudamos a chicago y por desgracia, allí todo se desmorono, aquellos días felices que pase junto a Jacob quedaron en el olvido. De seguido llegaba borracho y me pagaba, al cabo de un tiempo, no se conformó con golpearme y me violo cada vez más seguido sin importar mis ruegos mis gritos, al contrario parecía que cada lágrima lo enloquecía más.

Y así… así comenzó mi historia de terror.

Las flores ya no llegan,

el poema se acabó,

lo que un día fue amor,

en amargura se volvió.

Fin flash back

-Dos años, dos malditos años aguante tener al bastardo de tu hijo viviendo bajo mi mismo techo, pero me canse-dijo golpeándome contra la pared-me fastidia que el mocoso cada día se parezca más a esa sabandija, dos años me aguante que cada noche lloraras por el mientras veías a tu hijo bastardo, pero eso se va a acabar, ya no tendrás más el recuerdo de ese estúpido.

Me tiro con fuerza al piso y se dirigió al cuarto de Anthony, con la poca fuerza que me quedaba lo seguí.

-No le hagas nada, él no tiene la culpa de mis actos-grite con todas mis fuerzas

Jacob al darse cuenta que estaba detrás de él, me pego una cachetada que me tiro al piso.

-Cállate maldita perra-dijo pegándome patadas reiteradamente en cada parte de mi cuerpo-no eres más que una puta-y en ese instante quede inconsciente.

Flash back

Después de tres años de un matrimonio espantoso decidí irme, era lunes, Jacob estaba trabajando, Alice me esperaba en el carro mientras yo sacaba mi maleta, después de varios meses buscándola logre encontrarla, le conté todo lo que ha pasado, cada violación, cada golpe y a pesar que vivía en new york de inmediato se ofreció a  ayudarme, abordo el primer avión que encontró libre para venir a chicago, una vez aquí alquilo un auto, agradecía mucho la ayuda de Alice, solo esperaba no tener que volver a esta vida, poder al fin retomar mis estudios sin preocuparme por nada, al llegar al aeropuerto nos dirigimos hacia lo que sería mi nueva vida. Las semanas pasaron y Jacob estaba como loco buscándome, al cabo de un mes logro ubicarme, ya no podía salir como antes así que me dedique a ayudar a Alice en la casa todo lo que podía, era una suerte que Alice tuviera tanta seguridad ya que sus padres eran personas importantes en la sociedad y aunque no me gustara abusar de su confianza y amistad en este momento me era esencial su ayuda, así pasaron 6 meses y aunque no podía salir estaba contenta de no tener que esperar con temor la llegada de Jacob a casa. Una tarde Alice llego un poco frustrada.

-Bella tenemos que hablar- dijo arrastrándome hasta mi habitación.

-Bien, dime

-Tengo que hacer un viaje por dos meses, trate de que mandaran a alguien más pero me quieren a mí y obviamente no te voy a dejar aquí sola con ese loco rondando por ahí…

-Alice no te preocupes igual, tienes mucha seguridad aquí y es imposible que el ente y…

-Bueno si como sea-dijo restándole importancia a lo que yo había dicho-como te decía no pienso dejarte sola así que le pregunte a mi hermano si te podías quedar con él y…. dijo que si, así que empaca tus cosas que mañana te llevó a casa de mi hermano.

-Espera, espera… me estas queriendo decir que me voy a quedar en la casa de… de Edward

-Si Bellita

-Estás loca o que, como se te ocurre…

-Por favor Bells, estaré más tranquila si te quedas con el-dijo haciendo su típico puchero

-Está bien- Suspire derrotada, contra Alice nadie puede, ella sonrió al ver mi derrota

-Ok entonces ve a empacar tus cosas que mañana salimos a temprano.

Y con esto salió de la pieza, resignada empecé a empacar mis cosas, dos meses viviré bajo el mismo techo de mi primer amor, nunca le confesé a nadie la atracción que tenía hacia Edward a pesar que me llevaba dos años, ya que era el hermano de mi mejor amiga y en ese momento yo tenía novio, preferí guardar mis sentimientos para mi sola. A la mañana siguiente, a las 7 en punto estábamos entrando a la casa de Edward  que al igual que la de Alice tenía mucha seguridad, Alice le conto de carrera el porqué de la necesidad que yo me quede con él y terminado el relato ella se marchó. Los primeros días fueron un poco tensos entre ambos, yo seguía sin salir de la casa por miedo a que Jacob me viera, así que al igual que con Alice me la pase ayudando en los quehaceres del hogar, al llegar el primer fin de semana, y con Edward en casa, pudimos quitar un poco esa tención que había al inicio, me comento que después que acabo el instituto empezó a estudiar medicina, y  está comenzando con la residencia en uno de los hospitales de su padre. Después de un mes, mi relación con Edward era estupenda hace poco  le conté con detalle todo lo que viví después de la muerte de mis padres, todo lo que pase con Jacob, mientras le relataba mi historia pude ver en sus ojos ira, frustración, dolor y … ¿amor?, no eso no podía ser, a lo mejor era…compasión si eso es, y desde allí nuestra relación se estrechó aún más, me trataba como si fuera una muñeca de porcelana que con el más mínimo toque se podía romper. Una noche cuando ya faltaban solo dos semanas para que Alice volviera, salí a la terraza y allí me encontré a Edward viendo el firmamento.

-Que hermosa-dije observando también la luna y acercándome un poco más a él.

-No está mal- contesto el, se volvió lentamente para quedar frente a mí-pero yo no usaría la palabra hermoso-continuo él-no cuando tu estas aquí al lado para poder comparar.

Me quede helada, esto debía ser una broma, él no me podía estar diciendo eso, yo no significaba nada para él ¿o sí?

-Bella-empezó a hablar después de un tiempo al ver que yo no decía nada- no puedo ocultar más esto que siento por ti- me cogió de la cintura, me acerco a él y continuo- me gustas, y no es solo desde que vives aquí, me gustas desde el instituto, pero en ese momento me calle, pero no lo soporto más-puso una mano en mi nuca -si quieres que me detenga, solo dímelo y lo are de inmediato-dijo en un susurro.

Yo no me moví ya  que todo esto parecía un sueño, el poco a poco acorto la distancia que había en nosotros y me beso, aquel beso fue mágico, único, con su lengua delineo mi labio inferior pidiendo permiso para entrar y yo enseguida se lo concedí, en ese momento perdí toda capacidad de pensar, simplemente me deje llevar por todas las emociones que me embriagaban, cuando el aire nos faltó nos separamos un poco, y el junto nuestras frentes

-Te quiero Bella

-Yo también te quiero Edward

Después le conté que también lo quería desde el instituto, y así pasamos las siguientes 2 semanas en medio de besos y caricias, pero nunca llegamos a nada más, un día antes de que Alice volviera, llamo diciendo que el viaje se había retrasado ya que habían surgido unos cuantos inconvenientes, por lo cual se tendría que quedar como mínimo dos meses más, nosotros contentos de tener más tiempo para estar juntos le dijimos que no se preocupara, que obviamente no teníamos problema. Así paso un mes más, estábamos sentados en la sala viendo una película, bueno mejor dicho tratando de verla ya que Edward estaba besándome el cuello y jugando con un mechón de mi cabello, este al ver que había logrado mi completa atención me beso con pasión, deseo y amor. Enrede mis manos en su cabello tratando de profundizar el beso aún más, cuando el aire nos faltó nos separamos solo un poco.

-Te deseo Bella-dijo con la respiración entrecortada y sus ojos oscurecidos por el deseo.

-Yo también-dije besándolo de nuevo

Aquella noche nos dejamos consumir por el deseo y la pasión, el último mes juntos fue similar, cada noche nos entregábamos completamente el uno al otro sin medida alguna, asegurándonos de grabar cada detalle y cada parte del cuerpo del otro.

Ella quiere regresar

el tiempo que pasó

para poder revivir

los placeres del ayer

Fin flash back