Bella POV.

¿Cómo diablos me metí en esto? Si ya lo recuerdo fue gracias a mi queridísimo jefe y estoy aquí enfrente de la casa de mi supuesta suegra, para vivir, no sé ni cómo terminara esto, solo vienen a mi mente los recuerdos de cómo empezó esta farsa

Flash Black

“Empezaba otra vez la semana, iba entrando a la oficina cuando vi pasar al gran Edward Cullen , un empresario muy reconocido , por la prensa mundial, aunque es un cascarrabias y si ve una mujer pasar su frente , para él es como si viera una barra de chocolate va detrás de él, no conozco mucho de su vida y no quiero saber , solo conozco a Jasper, él es un caballero en toda la palabra no sé cómo se aguanta a ese señor de amigo, aunque no están viejo deberá tener unos 25 años, aunque yo solo tenga 22, no están viejo, pero no le quita lo morboso y mal educado que si es.”

-Muy buenos días.- dije saludando al resto de secretarias que se morían, por ese hombre yo enserio no veo lo que le ven, no están hermoso que digamos.

-Buenos días.- dijo una vos que reconocería en mil años, peor quería escuchar el gran señor Cullen.

-Buenos días jefe, ya le entrego el informe, de mercadeo.- dije en la forma más formal que pude tratando de camuflar la desconfianza que me hacía tenerlo cerca.

-Listo señorita.-desgraciado he trabajado con él desde que tengo la mayoría de edad y ni siquiera se sabe mi nombre.

-Swan, Isabela Swan- dije corrigiéndolo.

-Bueno señorita Swan espero que tenga un informe nuevo sobre las cifras del mes anterior- dijo con arrogancia que le pasaba eso no me tocaba a mí, pero no quería perder mi trabajo.

-Sí señor, a qué horas hay que entregárselo?-dije rogando que no fuera pronto, pero el muy desgraciado leyó mi rostro.

-Antes de las 12 del medio día lo quiero, quedo claro.-dijo volteándose y entro a su oficina mire el reloj y eran las 8 no habría forma de terminarlo si no comenzaba ya.

Ya era hora de entregarle el maldito informe a ese cascarrabias que tengo como jefe, seguro que si fuera una súper modelo  me trataría como reina, pero no como soy una empleada, me trata peor que un zapato, cuando iba entrando escuche como hablaba con Jasper , no sé cómo ese hombre puede tener un amigo como él.

-Jasper, no mis padres se enteraron y no sé qué hacer.- de que se habrían enterado los padres tenía claro que era un mentiroso de primera, pero no para tanto.

–Si Jasper, bueno hablamos luego, que es hora de que la señorita Swan me entregue el informe, puedes creer que esta mañana le hice creer que me olvide de su nombre.-así que era una mentira maldito mentiroso, pero mejor toco la puerta antes de que me mas rabia y le arranque la cabeza. Toc toc toc toque la puerta.

-Si adelante por favor.- maldito arrogante entre a la oficina me examino completamente, este señor si es pervertido.

-Señor Cullen aquí están los informes el que me pidió ayer y el de hoy.- dije lo más formal que pude aunque por dentro me estuviera muriendo por arrancarle la cabeza.

-Gracias muy eficiente señorita.- dejo la palabra si cree que esta vez lo voy a corregir se equivoca.

-Bueno, con su permiso.- dije volteándome para retirarme .

–Señorita Swan yo en ningún momento le dije que podía marcharse.- así que el muy desgraciado si se sabía mi nombre.

-Se le ofrece algo más?- muy desgraciado, se le amplio una sonrisa que si fuera otra persona me hubiera derretido pero como era el estúpido de mi jefe no.

-No, bueno si, pero no creo que este sea el lugar para hablarlas-dijo con un tono tan sexual, desgraciado.

-Bueno señor si este no es el lugar, no es mi obligación ya que en mi contrato, dice que obedezco ordenes dentro de la empresa.- dije muy sonriente gracias Jasper por hacer el contrato.

-Se puede retirar señorita.- dijo obviamente malhumorado, me fui con una sonrisita en mi labio.

Había pasado el resto del día normal, no me había vuelto a llamar, el estúpido de mi jefe, cuando voltee hacia el ascensor, venia Jasper con una gran sonrisa en los labios.

-Buenas tardes bella, que más?- pregunto el siempre tan amable.

-Bien Jasper y tú qué más?- le dedique una sonrisa, el me miro.

-Bien, está el ogro de mi amigo.- dijo con una sonrisa traviesa, todavía no puedo entender cómo se conocieron.

- Si Jasper está ya te anuncio.- cogí el teléfono, timbro dos veces.

-Si?.- dijo mi jefe del otro lado del teléfono.

 -Señor Cullen, llego el joven Jasper.- siempre hacia eso para que se sintiera más viejo, lo escuche gruñir.

-Bueno hágalo pasar señorita.- otra vez vamos con el mismo juego, solo le colgué, le hice una seña a Jasper para que siguiera.

-Gracias Bella, siempre tan amable chao.- dijo Jasper

–Chao Jasper.- dije, estaba contando los segundo para salir de esa prisión, pasaron casi media hora solo oía como discutían ahí adentro, de repente salió Jasper con una cara de enojado y se fue que habrá pasado de pronto vi como el señor Cullen se asomaba por la puerta.

-Señorita Isabella venga por favor –dijo muy serio y ahora que hice mal, me fui lentamente, me hiso una seña, para que me sentara y así lo hice.- Bueno voy hacer muy directo señorita.- dijo con una rara voz era muy seca, pero a la vez era como rogando.

-Si dígame.- dije previniendo lo peor y si me despedida, no eso no puede ser, no he hecho nada malo creo

-Bueno señorita Isabella se quiere hacer, pasar por mi esposa.- mis ojos se abrieron al máximo, me estaba pidiendo que fingiera ser su esposa.

-Señor Cullen usted está bien?- pregunte realmente preocupada, el solo se paró de la silla

-SEÑORITA ESTOY HABLANDO MUY ENSERIO, SE VA HACER PASAR POR MI ESPOSA SI O NO?-me grito hay si ya yo no podía soportar más me pare y hable lo más clamada posible.

-Mire señor Cullen, usted podrá tener toda el dinero del mundo, pero no puede venir a gritarme, solo porque pienso que tiene algo, cuando me está pidiendo que me haga pasar por su esposa usted está loco o qué?-dije muy calmadamente, él se relajó.

-Señorita por favor sí o no-dijo rogándome.

-Pues no señor Cullen, no me voy hacer pasar por su esposa, y si me permite ya es mi hora de salida- cogí mi bolso y salí de la oficina, será que me quede sin trabajo.

Fin Flash Black