EL DESTINO TAMBIÉN PUEDE CAMBIAR

Autor: AnonymousGirl
Género: Romance
Fecha Creación: 13/12/2011
Fecha Actualización: 22/12/2011
Finalizado: NO
Votos: 9
Comentarios: 32
Visitas: 17636
Capítulos: 7

EDWARD POV.

Era una daga ardiente que me calaba hondo ¿pero qué se supone que podía hacer cuando yo mismo la hube arrojado a sus brazos? y ahora la veia en sus ojos, sus mismos ojos, ¿pero quien era ella? ¿por qué ese olor tan peculiar? ¿por qué su mismo olor?

-Soy Renesme- la miré extender su mano hacia mi.. y en ese instante, dos ojos se posaron en los mios, pero ya no eran sus ojos, ya no era mi Bella... 

 


 ¿Qué pasaría si después de que Edward se marchara Bella se enterara de que está embarazada? Edward nunca pudo resistirse, después de una ultima noche, todo había acabado entre ellos, y ahora? 20 años después, Bella sigue como si los años no le hubieran pasado, pero tiene 3 cosas diferentes: una hija, una nueva familia, y unos nuevos ojos.. Bella, ya no es humana. 

DICLAIMER: Bien, como saben, los personajes aquí presentes son de S.Meyer, la autora de la saga "Twilight" solo la historia es mia, algunos personajes son inventados y solo hay uno, "Stefan" que solo tiene el nombre igual que el vampiro de TVD, pero no es el mismo, no se confundan. Sin más que agregar, los dejo con mi historia...

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Capítulo 1: PROLOGO

PROLOGO: EL COMIENZO DE TODO

BELLA POV. 

"Yo era como una luna perdida -una luna cuyo planeta había resultado destruido, igual que en algún guión de una película de cataclismos y catástrofes- que, sin embargo, había ignorado las leyes de la gravedad para seguir orbitando alrededor del espacio vacío que había quedado tras el desastre" suspiré recordando ese sentimiento que por mucho tiempo me había embargado, recordaba perfectamente los innumerables esfuerzos de Chalie para levantarme, así como también recordaba a Jake, y a aquel día en que asi como decidió darme la espalda, había decidido ayudarme..

*FLASK BACK*

Esa tarde había llegado más temprano de lo normal, lo noté por la cara de confusión de Jake cuando entré a su pequeño taller.

-¡Hey Bella! no te esperaba, te vez.. horrible- río mirándome mientras se sentaba en un viejo tronco que adornaba la entrada a su improvisado taller, hizo una seña invitandome a sentarme junto a él.

-Jake necesito hablarte- lo miré haciendo caso omiso a su comentario anterior.

-Escupelo ya Bella- lo noté esta vez más atento a mis palabras.

-Jake.. se que no te gusta hablar de esto..- pero me vi interrumpida de inmediato.

-¿De tu chupasangre? pff- rió sarcásticamente -Bella, sabes muy bien que eres tú la que te empeñas en obviar el tema, a mi me da igual si hablas o no de esa sanguijuela- pero yo sabía que estaba mintiendo, y que todo lo que decía se trataba de una treta para que pudiera hablar con él como verdaderos amigos, al menos eso lo entendia y se lo agradecía, pero no tenía idea de como reaccionaría con lo que yo había ido a decirle. 

-Bien.. Jacob, debes saber que si estuve con Edward- bajé la mirada avergonzada por tener que decirselo.

-Por supuesto, fue tu novio ¿no?- en ese momento supe que realmente el no había entendido.

-No me refiero a eso- negué mirandolo -Jake, estuve con Edward- abrí mis ojos lo más que pude intentando que me comprendiera.

-Oh.. -fue lo unico que salió de sus labios, sabía que tal vez tardaría en procesar la información y en reaccionar. -¿por qué me dices esto Bella? sabes lo que siento por ti, no entiendo..-

-Hay algo que tienes que ver- lo callé al instante haciendo una mueca, tomé los pliegues de mi sudadera y los levanté para dejar a la vista mi avanzado embarazo.

-¿Qué demonios.. Qué diablos es eso?- señaló mi vientre -¿es por eso que estás asi? esa maldita sanguijuela dejó que un monstruo creciera en ti- escuché todo lo que decía, sabía que no reaccionaría de una forma excelente, pero tenía la esperanza de que lo hicera de la mejor manera posible.

-Eso- acaricié mi vientre -como le llamas, no es un monstruo Jacob, es un bebé- 

-¡No Bella! escuchate, sé que aun amas a ese chupasangre pero no puedes cegarte, ¡Date cuenta! esa cosa acaba con tu vida, mirate en un espejo ¡Por Dios!- los gritos se hacía cada vez mas fuertes.

-¿Sabes? esperaba más de ti- sequé las lágrimas que empezaban a escurrir por mis mejillas y reuniendo la poca dignidad que me quedaba empecé a caminar hacia mi auto, maldiciendo la hora en que había decidido venir a pedirle ayuda.

-Espera- sentí como me tomaba fuertemente del brazo -Bella debes escucharme, lo que llevas dentro te está matando poco a poco, sabes lo que siento por ti, no puedo verte en ese estado, y mucho menos por culpa de ese maldito- negó con la cabeza casi rogando que le hiciera caso.

-No es su culpa- suspiré.

-¡No lo protejas más! todo esto es su culpa, sufriste por él cuando te abandonó, y ahora sufres por su hijo, ¡por el monstruo que llevas dentro!- intenté empujarlo con todas mis fuerzas, pero lo más que logré fue moverlo 2 centimetros.

-¡Alejate de mi! no te quiero cerca ni de mi ni de mi hijo, y que te quede algo claro Jacob, voy a tener a mi hijo, así esto me cueste la vida- abrí la puerta de mi vieja camioneta y arranqué dejando a un Jacob despotricando improperios, mientras yo luchaba para que las lágrimas no vielvaran a salir.

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Conduje hasta mi casa lo más rápido que pude, al menos quería refugiarme en un lugar que consideraba seguro, bajé de mi camioneta y entré a la casa, cociné algo rápido para Charlie y subí a mi habitación con ganas de recostarme un rato, precisamente papá tenia guardia nocturna, así que al menos podría llorar tranquila, me dejé caer en la cama sintiendo las fuertes patadas de mi bebé, que cada vez cobraban más fuerzas, intenté calmarlas o calmarme yo, pero nada lo lograba, después de todo, Jacob empezaba a tener razón, primero sufrí por Edward y ahora lo hago por su hijo, pero por si dos veces debiera vivir, dos veces elegiría vivir lo mismo.

Un ruido me sacó de mis ensoñaciones, era la ventana, la misma que se mantenía cerrada desde que los Cullen se marcharon, suspiré lavantándome y caminé hasta asomarme por ella, y me sorprendí de lo que vi..

-¿Jake?- susurré divisando su figura de entre las sombras.

-Bella, necesito hablarte, hazte a un lado- salí de la ventana y me senté en una de las esquinas de la cama, lo miré saltar de una forma ágil hasta entrar en mi habitación, no tuve tiempo de hablar cuando sus brazos se encontraban rodeandome -Bella, disculpa, en verdad disculpa, no queria hacerte sentir mal, quiero ayudarte pero..- su mirada lo había delatado, todo él irradiaba preocupación.

-¿Qué pasa?- pregunté prevenida.

-He metido las 4 patas- suspiró, me transformé en lobo y toda la manada se ha enterado de tu embarazo, Bella, en estas tierras, el tratado dice que no pueden venir vampiros sin que los Quileutes se hagan cargos y pues..-

-Mi bebé será un vampiro- lo interrumpí sacando mis propias conclusiones -¿quieren acabar con él?-

-No Bella.. quieren acabar contigo- y mi mandibula tocó el piso.

*FIN DEL FLASH BACK*

Y eso fue todo, eso había bastado, eso había sido suficiente para que Jake hubiera decidido ayudarme, aunque no había tenido precisamente su mejor idea, sonrei recordando cuando me propuso volver a Jacksonville, "¿Acaso estás loco?" le respondí, lo menos que quería era que confundieran a mi bebé con una bola brillante de discoteca, pero nuestro tiempo para pensar se había acabado, lo importante era salir de Forks, no importaba a donde.

*FLASH BACK*

-¿Que tal Alaska?- me miró interrogante, sopesé la idea..

-Puede ser, pero..-

-¿Pero qué?- me interrumpió -¿Edward? ¿puede que esté en Alaska?- me miró ofuscado -pues mejor así, sirve que se de cuenta el gravo error que cometió al dejarte ir- suspiré resignada.

-¿Cómo diablos planeas que me marche a Alaska? ¿qué se supone que le diré a Charlie?-

-Le dirás que te fuiste una temporada con tu madre a Florida, y a René le dirás que tu y yo decidimos irnos de viaje un tiempo- mostró la mejor de sus sonrisas.

-¿Tu y yo? Jake, no te creería- negué con la cabeza.

-Entonces no le digas nada, eres mayor de edad ¿no? ahora hazte responsable de ti y de tus acciones- que buena forma de mirar los 18 años, suspiré.

-De acuerdo, ¿iré en tu lomo o que?- reí, y por su mirada, deseé nunca haberlo sugerido.

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-¿Tienes todo?- me preguntó una vez estuve frente a él.

-Todo está en esta mochila- señalé la mochila que cargaba en mi espalda- ¿vamos?- lo miré sonreir y salir de la casa, lo seguí de cerca pero cuando llegué ya hubo dejado sus pantalones de lado y ya estaba en su forma lobuna, me monté sobre él y dejé que me llevara, pero no fue mucho lo que pudimos correr, fuimos interceptados cerca de los bosques canadienses.

Caí de golpe al suelo cuando jake se remontó en contra de toda la manada, pude notar la seña que me hacía para que corriera, y eso fue lo que hice, Dios sabe que al menos lo intenté, pero solo recuerdo haberme tropezado, al despertar ya era otra, había vuelto a nacer.

*FIN DEL FLASK BACK*

LIAM POV.

 

-¿Alaska?- miraba a mi familia empacar las cosas -¿me voy 1 día y deciden irse a Alaska? ¿por qué nadie me aviso?- desproticaba molesto mientras ayudaba a meter todo en el camión de mudanza.

-Liam, hijo, te lo estamos diciendo ahora, Luisana intentó llamarte, pero al parecer tu celular no sirve- Lucía se había acercado a mi intentando calmarme.

-Bien- saqué mi celular del bosillo, o al menos lo que quedaba de él, lo había aplastado en mi última cacería.

-¡Liam! ¿quieres ayudar a meter esto?- Amber empleaba su fuerza intentando meter el sillón en el caminón.

-Espera Amber, creo que tendremos que llamar otro camión- miré a Lucia hacer una mueca.

-Luisana, avisale a tu padre que Liam y yo iremos primero a llevar todo esto, y nos quedaremos de una vez desempacando y arreglando todo- Lucía dió las órdenes a los chicos y yo subí al asiento del conductor.

-Bien, entonces.. ¿Alaska?- la miré de reojo.

-Alaska- repitió después de mi.

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El viaje había sido tranquilo, muy tranquilo en realidad, hablé un poco con Lucía pero había mucha paz en la carretera, por supuesto que eso debía durar poco..

-¿Hueles eso?- la miré cuando un olor empezó a quemarme la nariz.

-Es un.. licántropo-

-No, huelelo, no es solo eso es..-

-Sangre- me interrumpió, y desapareció del camión tan rápido como yo.

No fue mucho lo que tuvimos que adentrarnos en el bosque para dar con el origen de toda esta sangre, a escasos metros divisé una pelea de lobos y justo frente a mi, se encontraba una mujer con un avanzado embarazo que amenazaba con salir en cualquier momento.

-Lucia- miré a la chica retorciendose de dolor -hay que hacer algo- casi como acto reflejo, mamá la tomó en brazos y llegó a velocidad vampirica al camión, la seguíd e cerca y arranqué a toda velocidad hasta nuestra nueva casa.

-Liam, busca toallas y agua caliente, hay que ayudarla- miré la escena con horror, corrí por lo que Lucía me pedía y regresé con las toallas de una de las maletas, calenté un poco de agua en la cocina y llegué con ella.

-¿Qué se supone que hagamos? hay que sacarle a ese niño, esto.. esto no es normal- negué con la cabeza.

-No, pero sé exactamente lo que hay que hacer- vi como Lucía se deshacía del pantalón de la chica y le pedía que la ayudara.

-Vamos, vamos, hazlo por el bebé, necesito que me ayudes- miré con nerviosismo a la chica, esta solo se retorcia de dolor y hacía la posible por acatar las ordenes de Lucía, pero parecía serle imposible. -Liam, el bisturi, en el maletín de tu padre- indicó, corrí hasta encontrarlo y ante mis atónitos ojos y los gritos de dolor de la chica, Lucía cortó en su vientre dejando ver el cuerpo de la criatura, las manos de Lucía se mancharon de sangre cuando sacó al bebé y me lo entregó, lo cubrí con una de las toallas limpias y miré a mi madre una vez más.

-¿cual es tu nombre?- se dirigió a la chica.

-Be.. Bella- y fue lo último que dijo..

-¡La perdemos Lucía, haz algo!- y el cuello de Isabella se vió invadido por dos colmillos filosos.

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-Rememoremos- pidió una vez más Amber - están queriendo decir que.. ¿ese bebé es de Bella? ¿y se la encontraron en el bosque a punto de dar a luz?-

-Así es- suspiré una vez más, al parecer, una semana no era suficiente para entender lo que había pasado con Bella.

-Creo que está bien que hayan decido ayudarla- Luisana se encogió de hombros -es una nenita hermosa- empezóa a juguetear con el bebé, que en realidad ya no parecía tan bebé, era una chiquilla que aparentaba facilmente un año, cuando apenas tenia una semana.

-Pero ahi algo que aun no entiendo- Eric entró a la discusión -su olor.. ese olor dulzón, es.. vampirico, y su crecimiento, Bella tendrá que explicarnos algunas cosas- sopesó la idea.

-Cualquier cosa qie queramos saber, estoy segura de que Bella nos las responderá tan pronto despierte- sentenió Lucia.

-¿Y si no recuerda nada?-

-Recordará que tiene una hija Stefan- respondió mi madre tranquila.

-Bien, entonces eso es todo, Luisana y yo nos encargaremos de la habitación del bebé- una sonrisa complice se asomó en los rostros de mis hermanas, y sin mucho que decir, desaparecieron con Stefan y Sebastian por la puerta, dejando a la bebé en manos de mi madre.

-¿Por qué no tocas algo Liam?- Lucía me miró expectante -estoy segura de que la bebé estaría más que tranquila si lo hiceras- me sonrió; miré la estancia, mi piano de cola blanca se encontraba en el centro de la sala.

-Claro- me levanté y me senté en él, interpreté una de las piezas de Debusi, "Claro de Luna"...

-¿Debussy?- escuché una voz que solo había escuchado una vez en mi vida.

-Bella- fue lo unico que dije.


 

 

Bueno pues espero que este prologo les haya servido para ubicarse con el fic, así sabrán mas o menos de que va y lo que pasará, tambien espero que les haya gustado, y si es asi, pues que dejen sus votos y comentarios, MUCHISIMAS GRACIAS POR PASARSE! 

Capítulo 2: EL DESPERTAR

 


 


 
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