Capitulo I

Estuvimos un día mas en Vancouver antes de irnos hacia Canadá, Fred iba contándome de  su vida humana de cómo solía andar por estos lugares antes de que Riley lo encontrara y lo  llevara a vivir la  vida que  vivíamos en aquel sótano,  era sorprendente ir mirando cada lugar que recorríamos  en el camino a Canadá.

Hicimos dos veces una parada para cazar,  pero cada vez que cazábamos era muy distinto a como cazar con Diego, solté un suspiro  antes de enterrar mi dientes en el cuello de la chica que tenia entre mis brazos, drene  rápidamente su sangre antes de soltar su cuerpo, no entendía el por que  Diego aparecía en mis pensamientos cada vez que cazaba, tal vez se deba al hecho de que lo extraño, de que nunca volvió

-¿sucede algo?-inquirió Fred

-no-negué con la cabeza-  ¿nos vamos?

-claro- acepto

Nos echamos  a correr por las oscuras  calles  hacia una pequeña casa abandonada que habíamos encontrado hace tal solo unos días atrás, mientras corría deje mis pensamientos correr libremente, aun   me preguntaba que habrá  pasado en el claro donde  estaba sentenciada la muerte de todos, abra alguien sobrevivido

-¿crees que alguien haya sobrevivido?- pregunto Fred haciendo eco de mis pensamientos

- no, no lo se, solo recuerdo que Sarah y el chico que se creía spadeiman  se confrontaron-murmure con la vista lejana

-ya veo…. ¿crees que Diego  haya estado allá? –inquirió

-no, el no estaba- musite evitando hacer una mueca- su rastro no estaba

Asintió y  continuamos nuestro camino, corrí más rápido hacia la pequeña casa, ya casi amanecía y no queríamos que nos vieran brillar como dos bolas de discoteca pero solo esto era el principio de la vida que tendríamos