Amor por Obligación (+18)

Autor: neni_bella
Género: Romance
Fecha Creación: 21/04/2012
Fecha Actualización: 28/04/2012
Finalizado: NO
Votos: 4
Comentarios: 32
Visitas: 37481
Capítulos: 20

ESTE FIC HA SIDO DESACTIVADO POR FALTA DE ACTUALIZACION SI QUIERES CONTINUARLO COMUNICATE CONMIGO MEDIANTE UN MENSAJE DE LO CONTRARIO SERA ELIMINADO

ORPHA

 

Bella, una chica de 14 años que para salvar el trabajo de su papá tiene que hacer todo lo que Edward Cullen le diga, y aunque el tenga 24 años y sea un sádico, mujeriego, violento y un vampiro tal vez.

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 3: Danza Sensual

Capitulo III: Danza sensual

 

-Hola Bella- Pude ver de nuevo su sádica sonrisa.

 

-Ho...hola Ed...Edward- Conteste nerviosa, estar a solas con el no me gustaba.

 

-Como vi que tardabas, quise venir a ver si todo estaba bien- Dijo acercándoseme lentamente.

 

-Pues si la verdad es que todo esta perfectamente-Dije decidida tragándome mis nervios.

 

-Si ya lo veo- Dijo mientras me observaba de arriba abajo.

 

 Edward se acercaba cada vez mas, mientras yo retrocedía, hasta que sentí la dura y fría pared en mi espalada sabia que ya no podía escapar.

 

-Bella te veo algo tensa- Colocándose solo a unos centímetros de mi cara, ante esto lo único que pude hacer fue voltear mi rostro y mira hacia otro lado. Escuche una risa de su parte y sentí como con una sola mano tomaba mi rostro por el mentón con rudeza y me obligaba a mirarlo.

 

-Bella, me pareció que en la mesa te diste cuenta de que no me gusta que me omitan o que me traten así, ¿Te diste cuenta pequeña Bella?- Pregunto mientras apretaba mas su mano entorno a mi mentón.

 

No respondí solo podía mirarlo con rabia.

 

-¿Te pregunte que si te diste cuenta?-Dijo soltando mi cara con tanta fuerza, que un lado de mi cara pego contra la pared. Nadie que fuera humano podía tener tanta fuerza. Mi cara me dolía, podía sentir la hinchazón.

 

-Entonces Bella sigo esperando la respuesta- Dijo tomando nuevamente mi rostro.

 

-Si Edward, si me di cuenta- Dije algo asustada.

 

-Así me gusta, y quiero que sepas que de ahora en adelante, me responderás así siempre- No entendía nada de lo que me decía, es como si volvería a verlo- Ahora volvamos al salón.- En un abrir y cerrar de ojos parecía el Edward caballeroso que nos había recibido hace unas hora. Me ofreció su brazo, dude antes de tomarlo pero ¿tenia otra opción? Lo tome y caminamos hasta la mesa.

 

-Bella, cariño ¿donde estabas?- Pregunto mi madre preocupada.

 

Pero antes de que pudiera decir algo Edward contesto por mí.

 

-Lo siento Sra. Swan, fue mi culpa entretuve a Bella en su camino de vuelta- Dijo con una sonrisa. No podía creer que alguien pudiera ser tan falso, mentiroso, cínico, odiaba al mounstro de Edward Cullen.

 

-Oh, cariño no te preocupes, con tal de que hallan llevado bien, y de que Bella no allá sido grosera- Dijo mi madre mirándome con una advertencia en sus ojos.

 

-No se preocupe Sra.Swan, Bella es muy educada- Dijo el mounstro mientras me sonreía. No pude hacer mas que devolverle una sonrisa, pero claro muy falsa.

 

Mi madre se marcho sonriendo, y volví a quedarme sola con Edward, estaba un poco mas calmada por que sabia que aquí el no podía hacerme nada. Vi que iba a decir algo pero se callo de repente y pude ver como una chica de no más de 20 años se nos acercaba coquetamente, claro mirando a Edward.

 

-Hola lindo- Dijo la chica abrazando a Edward. Ella era extremadamente parecida a la chica de la tienda, con el cabello rubio rojizo, con un exceso de maquillaje, un vestido que no dejaba nada a la imaginación y se veía que era muy superficial. Solo si ella supiera la clase de hombre que era Edward, o talvez lo sabia y no le importaba- Te extrañe, ven vamos a bailar.-

 

-Claro Taya- Aunque pude ver cara de fastidio cuando dijo esto, cuando se fueron pude observar como el colocaba la mano en el trasero de ella y ella reía tontamente.

Después de esto me dedique a caminar por el salón, sentía la mirada de muchas hombres encima de mi. Trataba de no prestarle atención. Me dirigí a la barra y pedí al cantinero un refresco.

 

-Ten linda- Dijo este cuando me lo entrego. Sonreí para no ser descortés, seguí observando el salón, la música no era la misma de hace un rato, ahora las luces estaban apagadas y habían muchas luces de colores y música electrónica. Observaba a todas esas personas bailando y me entraron ganas de bailar también.

 

-Hola preciosa- Dijo una voz a mis espaldas. Voltee viendo que era un chico de no mas de 20 años- Mi nombre es Jacob, Mucho Gusto.-Me dijo sonriendo.

 

-Hola, mucho gusto- Dije sonriéndole, la verdad es que se veía muy simpático- Me llamo Bella-

 

-Ummm Bella-Dijo con rostro pensativo- Hermoso nombre- Me sonroje cuando dijo esto. Lo único que pude hacer fue darle una sonrisa, que este me devolvió

 

Mientras sucedía todo esto podía sentir la mirada de alguien a mis espaldas, voltee y trate de ver de quien se trataba no era nada mas que Edward, al encontrarme con su mirada me dio un escalofrió, su mirada era de odio, parecía la mirada de un asesino, me voltee hacia Jacob, todavía nerviosa.

 

-Entonces hermosa Bella, ¿quieres bailar conmigo?- Dijo ofreciéndome su mano. Encantada acepte.

 

Caminamos hasta la pista de baile tomados de la mano, la verdad es que con Jacob me sentía bien, era como si lo conociera de todo la vida, la música seguía siendo electrónica solo que un poco mas lenta y mas sensual. Comencé a moverme, yo que casi nunca bailaba creo que lo estaba haciendo bien, por que veía como Jacob no dejaba de mirar mi cuerpo y se acercaba mucho más a mí. También podía ver como otros hombres también me miraban, por encima del hombro de sus acompañantes, mientras me reía internamente no me di cuenta de que Jacob me había tomado por la cintura y me pegaba mas a el.

 

Después de un rato de bailar. Jacob me ofreció ir a tomar algo, por supuesto luego de tanto movimiento ambos estábamos agotados, así que fuimos hasta la barra donde solo pedí un agua.

 

-Así que… ¿Cuantos años tienes Bella?- Pregunto Jacob mientras bebía de su trago.

 

-Catorce- Respondí algo nerviosa, como ya lo dije estoy obsesionada con la edad. Pude ver como Jacob me miraba de forma extraña y por fin sonrió – ¿Y tu?- pregunte

 

-Tengo diecinueve años, la verdad que con ese traje te ves algo mayor, pero ya me imaginaba que tendrías esa edad- Me dijo mientras me dirigía una sonrisa.

 

-¿Trabajas en la empresa de los Cullen?- Pregunte  con cuidado

 

-Si, soy un socio de Carlisle aunque ahora sea Edward el que maneja la compañía.-Dijo con algo de molestia, supuse que el también concia un poco al verdadero Edward.

 

Después de hablar un rato con Jake, me di cuenta de que era un chico muy simpático, y me era fácil hablar con el. Me contaba de todo como fue que se unió a esta empresa, de sus viajes, hasta de sus romances, seguimos hablando de cosas triviales, hasta que vi como mi madre se acercaba a nuestra mesa, y antes de que pudiera llegar y decir algo que me avergonzara, me disculpe con Jake y de dirigí hasta ella.

 

-Bella ¿quien es ese chico?-Pregunto antes de que yo pudiera decir una palabra.

 

-Se llama Jacob, es solo un amigo mama- Vi como lo observaba de arriba abajo.-Solo estábamos hablando un poco, por que estaba aburrida.

 

-Si, bueno eso no era lo que venia decirte si no, que alguien te busca cariño- Me sorprendí mucho, yo no concia a nadie en este lugar, y ya me estaban buscando. Trate de calmarme, yo no había hecho nada malo así que no podía ser nada que me perjudicara.

 

-Así- Dije con voz calmada-¿Quién mama?

-Es una sorpresa, hasta yo misma estoy sorprendida-Dijo con picardía en sus ojos- Pero se que te va a gustar.

 

Sonriendo, empecé a caminar lentamente, la verdad es que abría preferido quedarme hablando con Jake, pero de repente sentí como mi mama me jalaba del brazo mientras me pedía que me apurara mientras era jalada contra mi voluntad, pude ver que nos acercábamos a una mesa donde se encontraba mi padre, el Sr.Carlisle, la Sr.Cullen, sus hijos, y entre ellos estaba el.

 

Me detuve frente a ellos, evitando mirar a Edward aunque podía sentir su mirada intensa sobre mí.

 

-Que sucede mama, para que me necesitaban- Pregunte sorprendida, no sabia para que rayos mi madre me había arrastrado hasta hay.

 

-Pues…- Dijo mirándome con alegría- Es que Edward desea bailar contigo unas piezas.

 

Me quede petrificada, ¿que podía hacer? No podría negarme, mi madre sabría que pasaba algo, tenia que pensar algo que decir no quería bailar con el y menos podía imaginármelo. El y yo en una pista completamente a oscuras y sabría que a allí, el podría tocarme por que sabia perfectamente que nadie estaría pendiente de nuestro baile.

 

Nerviosa mire a mi mama que me miraba, con una enorme sonrisa en su cara y a mi padre que sus ojos estaban felices, supuse que pensaban que podría hacerme amiga de Edward y salvarlo de perder su empleo, no podía negarme, no a mi padre que siempre me había consentido en todo, no a el no.

 

-Pues… Vamos- Dije sin sonreír, ya mucha hacia aceptando bailar, cuando tomo mi mano con fuerza, sentí como un escalofrió recorría mi espalda.

 

Nos acercamos a la pista cuando llegamos a la punta, me detuve pero sentí como Edward me jalaba hacia el centro de la pista donde no se podría ver nada desde las mesas, donde se encontraban mis padres, al principio me resistí pero la fuerza de su mano me hizo desistir. Me dolía ya la mano por sus apretones.

 

Cuando llegamos al centro el se dio la vuelta hacia mi, viéndome, yo no pretendía bailar.

 

-Baila para mi Bella- Entendí perfectamente a pesar de la música tan alta, hice un gesto de negación pero antes de poder terminar el gesto con mi cabeza, sentí su mano apretando mi muñeca con tanta fuerza que mis ojos se cristalizaron- Quizás no me explique bien, te dije, baila para mi Bella- Me volvió a repetir mientras apretaba tanto mi muñeca que podía sentir que se formaría una hematoma.

 

No sabia de cuanto era capaz Edward así que decidí bailar, al principio solo me movía poco pero vi como Edward no dejaba de mirarme así que trate de mantenerlo así, no quería que se acordara de mí, prefería que viera mi cuerpo. Observe como se iba acercando a mí y yo por inercia retrocedí, pero Edward me tomo por el brazo y me acerco tanto a el que podía sentir su respiración.

 

-Muévete mas- Dijo apretando mi brazo- Que sea más sensual, mucho mas que el baile que hiciste para Jacob- Cuando dijo esto ultimo sentía que su apretón se volvía cada vez mas fuerte.

 

Antes de que el pudiera hacer o decir otra cosa, comencé a bailar como el dijo, pensando que todo era por el bien de mi padre. Baile lo más sensual que pude, vi como los ojos de Edward brillaban no sabia que tipo de brillo era ese, si de lujuria, deseo, satisfacción o excitación. Aunque en realidad no quería saberlo.

 

Sentí como la mano de Edward aprisiono mi cintura, trate de alejarme pero no podía ni moverme su mano estaba fija en mi cintura, aprensándola tanto que podía sentir su miembro tocando mi vientre. Trate de alejar esos pensamientos de mi mente solo seguía bailando, después de unos 10 minutos sentí los labios de Edward mordiendo y besando mi cuello, se sentía bien , pero NO era Edward. El mounstro que me obligaba hacer todo esto.

 

Solo deseaba que se acabara todo esto pronto y el me dejara en paz, aunque había algo que me decía que así no seria, ni ahora, ni después, ni nunca…

 

Terror; El primer sentimiento.

Capítulo 2: La Fiesta Capítulo 4: La Decision

 
14435988 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10755 usuarios