¿Egoístas? Si, ¿Violento? Un poco, ¿Enamorado? Nunca… 

 

-Bella Despierta- Escuche la voz de mi madre, desde la cocina- Llegaras tarde.

 

Si responder, me moví lentamente en dirección al baño, cerré la puerta silenciosamente, luego me dispuse a desvestirme, ya completamente desnuda, encendí la ducha, coloque el agua tibia, necesitaba despertarme completamente ya alejar todos los pensamientos que entraban a mi mente todas las mañana, y no se iban hasta que tocaba mi hora de dormir.

 

Cuando mi cuerpo, izo contacto con la tibia agua, fue como un Dejà vu.

 

Edward y yo en el Jacússi, con el agua tibia.

 

Y con este recuerdo, muchos más llegaron a mi mente, todavía estaba presente en mí, el espantoso día que Edward me dejo en esa solitaria esquina.

 

Flashback…

 

Cuando observe que nos deteníamos en la esquina para cruzar, dirigí mí vista a Edward, tendría que mover un poco más el auto.

 

-Ya se que no vives aquí, pero no quiero que tus padres me vean. Tendrás que caminar- Dijo sin mirarme.

 

Nuevamente su indiferencia, sentí otra vez como mis ojos ardían. Pero no debía llorar, no aquí.

 

Cuando me dispuse a abrir la puerta del auto, oí la voz de Edward-

 

-Adiós Bella- Y eso fue lo último que oí, antes de que el auto de Edward desapareciera por la calle.

 

Sabía que me veía como una tonta parada en una solitaria esquina, pero no pude aguantar que unas rebeldes lágrimas empezaran a salir de mis ojos, y así, camine lentamente hasta mi casa.

 

Pero unos paseos antes de llegar, me detuve abruptamente, seque mis lagrimas, aparte debía pensar en que les diría, porque supuestamente “los padres de Ángela” me habían dejado aquí varada.

 

Pero no me importaba mucho eso ahora solo quería encerrarme en mi cuarto,  llorar, dormir y olvidarme de todo.

 

Así que seguí caminando, debían ser cerca de las 4 PM, así que  ya el sol estaba prácticamente oculto, cuando llegue a mi casa espere unos momentos que las lágrimas se detuvieran.

 

Necesitaba pensar en cosas bunas, como que vería a mis padres, volvería al colegio. Estos pensamientos hicieron que me sintiera mejor, así que decidí limpiar los rastros de mis lágrimas y tocar la puerta de mi casa.

 

Apenas toque una vez, y ya tenia a mi madre, abrazándome sin yo darme cuenta.

 

-Ah, mi Bella, cariño, te extrañe tanto- Dijo mientras depositaba besos en mis mejillas- No te volverás a ir tanto tiempo, de eso estoy segura- Dijo mientras tomaba, con ambas manos mi rostro.

 

Vi que me observaba fijamente, como tratando de entender algo, ella tenia su vista clavada en mis ojos, como tratando de “leerme”

 

Pero todo esto no duro mucho ya que ambas volteamos al oír la voz de Charlie.

 

-Renne cariño porque tardas tanto- Al terminar de decir esto, observe a mi madre, y vi que esta sonreía tontamente, y me guiñaba un ojo.

 

Baje mi mirada sonrojada, y me di cuenta de que mi madre traía una bata prácticamente blanca transparente.

 

Aun mas sonrojada cerré mis ojos tratando de sacarme la imagen de mis padres, que se había formado en mi mente.

 

-Cariño Bella esta aquí- Grito mi madre, mientras dirigía nuevamente su vista a mi.

 

Apenas mi madre termino de decir esto, mi padre llego amarrándose su bata de cuadros rojos y negros.

 

Bella, preciosa por fin estas aquí- Dijo mientras mi madre le cedía el paso para que me abrazara.

 

“No creo que me extrañaran tanto”, pensé internamente. Pero me alegraba demasiado por fin estar aquí con mis padres.

 

-Ven cariño, cuéntanos como la pasaste- Dijo mi madre mientras me arrastraba prácticamente al sillón.

 

Necesitaba una excusa para no hablar con mi madre, sobre mis días con “Ángela”, pero a mi madre nunca podría engañarla fácilmente, ella realmente buena para adivinar cuando a mi me pasaba algo o cuando mentía.

 

Así que decidí que lo mejor seria, que me imaginara, que de verdad había ido a casa de Ángela, para que mis mentiras no sonaran tan falsas.

 

-La verdad, fue muy divertido, sus padres son realmente amables- Dije lo mas convencida posible- Me han invitado a quedarme otro día.

 

Un momento, eso fue como pedir un permiso por si Edward, volviera aparecerse, aunque lo dudaba, lo mas seguro es que ya hubiera conseguido a una hermosa mujer, con quien estar, o con quien “jugar”.

 

-Oh Bella eso es genial- Me grito prácticamente mi madre, parecía que se había creído mi mentira. Sonreí ante la emoción de mi madre, la había extrañado tanto, que yo misma sonreí con ella, y la abrase sin ningún motivo.

 

Este me devolvió el abrazo emotivamente, la verdad es que mi madre sabia dar amor, a todo el que lo necesitaba y en estos momentos, era lo que yo mas deseaba, quería que alguien me dijera que valía para algo, que me hiciera sentir importante en estos momentos.

 

Seguimos hablando por un par de minutos mas, sobre todo lo que había hecho con los padres de Ángela, y ella misma, por un momento mi madre, había sacado la sugerencia de invitarlos a cenar, pero me negué ya que tuve que inventar que los padres de Ángela se irían de viaje.

 

Pero con todo esto no pude hacer que mi madre cambiara de opinión, así que mi única salvación para que no se enterara de lo que verdad ocurrió seria, que me uniera más a Ángela.

 

Gracias a Edward era que yo tenia que hacer todo esto, si el no se hubiera encaprichado conmigo, yo mi vida seguiría siendo normal.

 

Pero maldita sea, porque rayos no podía sentirme mal, por todo lo que me había pasado, si no que me sentía feliz, por haber pasado esos días con Edward, y me sentía mal, porque no lo volvería a ver, o a tocar de la misma manera.

 

Lo único que me hacia sentir mejor, que como mi padre trabajaba hay, algún día podría observarlo por lo menos.

 

-Bueno cariño será mejor que vallas a dormir, tienes muchas ojera- Dijo mi madre sacándome de mis pensamientos.

 

-Si tienes razón- Dije mientras me levantaba lentamente, los abrazaba a ambos, y emprendía mi retirada.

 

 Camino a mi habitación los recuerdos de mis días con Edward, llegaron a mi mente, tan rápidos con el flash de una cámara, ejemplo estupido lose, pero era lo único que llegaba a mi cabeza, necesitaba darme un relajante baño.

 

Y así lo izo, el agua caliente relajo mis músculos, me sentía un poco mejor, pero el agua caliente no pude evitar que las lágrimas salieran de mis ojos sin control.

 

Apenas coloque un pie, fuera de la ducha mi cuerpo se estremeció de frió, esta noche seria una realmente fría.

 

Lentamente me dirigí a mi habitación, solo con la toalla, sobre mi cuerpo, con todo lo que había pasado unos momentos, me había olvidado por completo de mi ropa.

 

Ya en mi habitación  me coloque unos pequeños shorts morados, y una camisa blanca de finas tiras.

 

Y así me fui a la cama dejando que mi imaginación vagara por donde quisiera.

 

…Fin Flashback

 

Y todo lo que pensé ese día, lo ice, me uní mucho mas a Ángela, ahora sus padres venían cenar siempre y yo estaba metida en su casa la mayor parte de mi tiempo.

 

Ya había pasado 4 meses desde la ultimas vez que lo vi, y me lleve una sorpresa al saber, gracias a mi papa que Edward se encontraba soltero, y que había ascendido a mi padre a un cargo muchísimo mas importante.

 

Después de todo era lo menos que podía hacer.

 

Pero había algo mucho peor en mi vida, gracias a la insistencia de mis padres, los señores Newton y hasta los padres de Ángela, y ella misma un poco.

 

Había comenzado hace 2 mese y medios una relación con Mike, creo que lo hacia solo para poder olvidarlo a El, pero siempre era imposible, cada vez que Mike me besaba, llegaba a mi mente la imagen de Edward besándome, o lo que se sentía y no había comparación.

 

 La verdad Mike, era dulce, pero simplemente no podía estar  con, de la forma que el quería y se lo demostré en el viaje de mi cumpleaños.

 

Cuando cumplí mis 15 años, mis padres me regalaron un viaje de 2 semanas a Europa, ya que gracias al ascenso de mi padre, este ganaba mucho mejor que antes.

 

Antes de irme Mike había logrado convencer a todos de que era buena que el fuera conmigo, “por mi seguridad” decía el cada vez que hablábamos del tema. Y así el me acompaño. Cada vez que trataba de decirles a mis padres que no, ellos me decían que me podía suceder algo y que era buena idea de parte de Mike acompañarme, y que no me quejara ya que el lo hacia por mi bien.

 

A veces no podía creer lo ingenuos que eran mis padres, se veían muy claramente las intenciones en su rostro, nada más con ver como sus ojos brillaban cada vez que usaba alguna camisa de tiras o que se notaran mis senos. Era realmente tonto no darse cuenta de esto.

 

Pero no valió la pena ya que igual mis padres, lo enviaron conmigo.

 

Ya en el hotel, Mike intentaba por todos los medios que nos quedáramos en la Suite, y por las noches cuando dormíamos, sentía como se acercaba a mí, empezaba a besar mi hombro, pero yo me alejaba dándole a entender que no quería nada.

 

Pero no pasó hasta la 5ta noche, que Mike logro que tomara demás en la celebración en honor a las 15ñeras, que hacían en el hotel, esa noche recuerdo que Mike empezó a besarme. Luego de hay recuerdo mas o menos que llegamos a la suite, y no paramos de besarnos hasta que estuvimos en la cama, donde yo le quite la camisa, y el al igual que yo, empezó su tarea de desnudarme.

 

No quería que el me tocara, pero cada vez que sus manos, rozaban mi piel, me imaginaba que era Edward, aunque claro nadie podría nunca tocarme como el lo hacia.

 

Y con ese pensamiento deje que Mike, llegara hasta donde quería llegar. Cuando me penetro, vi en su rostro la sorpresa de que yo no era virgen. Pero no dijo mas si que se encargo de hacerme gemir, y por mas que no quisiera que me tocara, mi cuerpo respondía a sus instintos naturales, traicionándome.

 Con la rabia de que fuera el y no Edward, le clave mis uñas en su espalda. Este gimió, pensando que yo le hacia esto en señal de aprobación y excitamiento.

 

Pero que mas podía hacer, así como en mi primera vez me entregue, de nada serviría pelear con Mike, sabiendo que mi propio cuerpo me traicionaría, y que el era mucho mas fuerte que yo.

 

Después de esa noche, nada fue igual, cuando desperté a la mañana siguiente, estaba realmente molesta, Mike me había emborrachada solo para que me acostara con el.

 

Y se dio cuenta de mi enfado, cuando quiso tomarme la mano y yo lo solté de un manotazo.

 

Apartar de ahí yo misma me encargaba de mi diversión, siempre iba a los hermosos parques de Italia, Francia, Portugal, y muchas mas, y por supuesto que sin Mike, este se quedaba en la suite, o siempre me seguía de lejos.

 

Así pasaron mis días, la ultima noche del viaje cuando estaba recogiendo todas mis cosas, me di cuenta de que Mike me miraba demás, y observe que en varios momentos intentos decir algo, pero no le salía nada de la boca.

 

-Bella- Me llamo, pero yo por mi parte lo ignore olímpicamente.

 

Las mas seguro es que quería hablarme para pedirme disculpas por lo que me había hecho hace unos días.

 

-Bella- Volvió a llamarme- Bella necesito que me veas- Grito prácticamente. Pero yo seguí ignorándolo mientras iba de un lado al otro buscando que no se me quedara nada.

 

-Bueno si no me prestas atención, lo tendré que hablar con tus padres- Dijo empezando a recoger sus cosas.

 

Un momento, me dije a mi misma Mike no quería pedirme disculpas, quería hablar de otra cosa y tenia la leve impresión sobre que se trataba.

 

-Dime Mike que necesitas- Dije hablando con la voz mas dulce que tenia.

 

Por un momento pensé que se iba a negar porque observe como me miraba como evaluándome, pero finalmente hablo.

 

-Me puedes explicar, como es que no eras virgen- Dijo mirándome fijamente con reproche en sus ojos, y sus brazos en forma de jarra.

 

-Cuando la noche que me violaste- Sabía que estaba siendo cruel, pero necesitaba que cambiáramos de tema, como le podría explicar que el jefe de mi padre, me secuestró por unos días, me golpeo, me violo, fui a la playa con el, y no nos cansamos de tener sexo, y que luego me abandono en la esquina que esta por mi casa.

 

No definitivamente nunca podría explicar eso, así que necesitaba cambiar de opinión.

 

-No te viole Bella- Dijo mientras se volvía para seguir acomodando su ropa. Supuse que era para que no le viera la cara.

 

-Oooh, claro que si lo hiciste- Dijo siendo lo mas dura y cínica posible.

 

-Tú no te quejaste- En realidad el tenia razón, porque no luche como debería, pero recuerdo porque no lo ice, pero tampoco podría explicarle eso.

 

-Claro que no luche, porque alguien me emborracho, y no tenia idea de lo que estaba diciendo- Dije mientras vi como a expresión de Mike cambiaba completamente a una de desilusión.

 

-No me cambies el tema Bella, como es que no eras virgen Bella- Dijo nuevamente con reproche.

 

-Si lo era, que tu no te dieras cuenta, por querer correr es otra cosa- Dijo tratando de que creyera mi mentira, necesitaba confundirlo.

 

-Bella, yo se de que te estoy hablando, y tu no eras virgen para ese momento- Dijo con demasiada seguridad.

 

-Que? Ya has violado a otras de tus novias?- Le dije desafiándolo, necesitaba que se molestara y no me importaría pelear con el por “mi violación” pero necesitaba que cambiáramos el tema de mi virginidad.

 

-Bella basta ya, no te viole- Dijo ya frustrado.- Pero estoy seguro de que tu no eras virgen para ese momento.

 

-Si lo era Mike, y en tal caso si no lo fuera que les dirías a mi padres- La grite haciendo una pausa para ver su expresión.- “Oh charlie disculpa, que interrumpa tu partido de béisbol, solo Quería decirte que en el viaje de Bella, cuando la viole me di cuenta de que no era virgen.- Hice una pausa para respirar y seguí- Eso es lo que piensas decirle. Pues te aseguro que te saldrá todo mal.

 

Vi como su rostro se puso totalmente blanco,  parecía cera, pero había logrado mi cometido, estaba segura de que no diría nada, Mike era muy cobarde como para enfrentarse a mi padre.

 

Solo imaginarme la imagen de Mike diciéndole todo eso a Charlie me izo reírme, pero necesitaba que Mike viera que estaba hablando completamente enserio.

 

-Además si era virgen- Dije antes de meterme al baño.

 

….

 

Luego de darme una refrescante ducha, me cambie en el baño, no quería provocar a Mike, así que me vestí, con unos pantalones que me quedaban tan largos que se arrastraban en mis talones, y eran completamente negros, y también me coloque una sudadera que me quedaba enorme negra igual.

 

Me acosté los mas pegada a la punta posible, no quería estar cerca de Mike,  pero aun así mi estrategia no funciono porque ya cerca de la media noche, lo escuché acostarse a mi lado, y pasar una mano por mi costado, pero estaba muy cansada y adormilada como para moverme.

 

…

 

Cuando me desperté aun seguía en la misma posición, que anoche, pero Mike se encontraba mucho mas cerca de mi, y su mano ya tocaba prácticamente mis senos, molesta me levante dándole un golpe apropósito en la mano.

 

 Y me retire al baño, me duche, cepille mis dientes y mi cabello, cuando estuve lista, Salí sin siquiera dirigirle a Mike una mirada cuando paso por mi lado para entrar al baño.

 

Guarde todo lo que había usado en el baño, en mi maleta, y me dispuse a bajar, supuse que Mike seria lo suficientemente inteligente como para saber que yo había bajado.

 

Ya en la recepción le pedí, al muchacho que estaba tras del mostrador que me pidiera un taxi, este gustoso lo izo, cuando el taxi llego, monte mi maleta y estuve apunto de dejar a Mike, pero no quería tener que darle explicaciones a mi padre, cuando llegara sin el.

 

Así que espere unos 30 minutos, cuando por fin lo vi bajar del ascensor me di cuenta de que venia hablando con una de las trabajadoras del hotel.

 

Con razón había tardado tanto, me dije mentalmente.

 

Cuando Mike se dio cuenta de donde estaba, corrió a mi lado.

 

-Bella cariño me tenias preocupado- Dijo abrazándome, de un manotazo me aleje de el.

-Si claro- Esto fue lo ultimo que el escucho de mi parte.

 

Cuando llegamos al aeropuerto, faltaban 30 minutos para nuestro viaje, pero de igual manera decidí montarme en el avión, ice todo el proceso, mostré mi pasaje, pasaporte, y entregué mi maleta.

 

 Mike me seguía justo atrás de mi, sonriéndole a toda mujer que pasara por su lado, en realidad a mi no me molestaba su actitud me daba tan igual, que era como si el fuera un desconocido y no mi novio.

 

Ya dentro del avión me senté al lado de la ventanilla, necesitaba pensar en lo que había pasado en mi viaje, no precisamente en Mike, si no todos los lugares que había visitado,  los museos, los caffes, todo era realmente hermoso, quería volver pero con otra compañía. Pensé esto justamente cuando Mike se sentó a mi lado.

 

Cuando sentí la mano de Mike, en mi rodilla, estuve a punto de quitarla, pero si iba a seguir de novia con el, necesitaba que nos lleváramos mejor.

 

El resto del viaje fue normal, la azafata nos trajo un pequeño almuerzo, y luego la merienda, nos avisaron, que llegaríamos dentro de unas 4 horas, si ya eran las 8:00 PM estaríamos con nuestros familiares a eso de la media noche.

 

Por un momento me quede dormida y no supe más de mi, si no hasta que Mike me despertó avisándome que habíamos llegado.

 

Eufórica por ver a mis, padres abrí los ojos rápidamente, y así como dijo Mike, estábamos en el aeropuerto de USA.

 

Apenas nos bajamos del avión, y llegamos a la cafetería, sentí como unos brazos me rodeaban.

 

-Bella, cariño, como te extrañe- Dijo mi madre mientras me besaba ambas mejillas.

 

-Mama yo también te extrañe mucho- Pero no dure mucho tiempo abrazada con mi madre ya que mi padre me tomo en sus brazos.

 

-Mi pequeña te extrañe tanto- Dijo mi papa mientras me besaba en la mejilla y me daba un caluroso abrazo.

 

-Yo también los extrañe muchísimo a ambos- Dijo sonriéndoles.

 

-Y a mi no me extrañaste- Pregunto una voz a mis espaldas, una que ya conocía muy bien.

 

-Por supuesto que te extrañe- Dije mientras volteaba.

 

Ahí estaba Ángela, mi mejor amiga. Nos abrazamos durante unos momentos.

Pero luego tuvimos que separarnos para ir rápido al auto, ya que los padres de Mike lo estaban esperando.

 

En el camino al auto hablamos de todo, les conté sobre lo hermoso que eran las cosas en Europa, los museos, los hoteles, los restaurantes, las fuentes, edificios antiguos, todo era realmente perfecto.

 

Ahora les tocaba el turno a mis padres, me dijeron que fueron en varias ocasiones a comer en unos restaurantes. Fueron a un parque y otras cosas.

 

Cuando llegamos al auto, mi padre se coloco como el chofer, mi madre a su lado, Ángela se puso en una ventana Mike en la otra por lo cual a mi me toco ir en el medio.

 

Todos íbamos hablando animadamente, hasta que mi madre menciono algo que izo que mis bellos se erizaran.

 

-Bella, habra otra fiesta- Dijo sonriéndome, al principio no entendí, cual fiesta podría ser- En la empresa donde trabaja tu padre, recuerdas como la que hubo hace unos meses.

 

Como podría olvidarla si ahí comenzó todo.

 

Después de todo, talvez lo volvería a ver…